Desde mayo del 2023, el Senado de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley para dejar de considerar el COVID-19 como una emergencia nacional, lo que implica que el Gobierno pasará a tratar el virus como una enfermedad endémica. Este proyecto se creó en respuesta a la declaración emitida el 5 de mayo  por el Comité de Emergencias sobre la COVID-19 dirigida al Director General de la OMS, Dr. Tedros Adhanom, en la que se indicaba que el coronavirus ya no es una emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII). El Dr. Tedros aceptó la recomendación del Comité de Emergencias. 

El Director de la OMS declaró que el virus ya no constituye una emergencia de salud pública de importancia internacional y que “es momento de que los países pasen del modo de emergencia al manejo de la COVID-19 junto con otras enfermedades infecciosas”. Sin embargo, es importante aclarar que el hecho que este no sea una ESPII, no implica que el virus haya terminado. 

EL COVID-19 se transforma en nuevas cepas que conviven con nosotros día tras día, tal como sucede con otras enfermedades. Es por esto que sigue siendo necesario guardar las precauciones de bioseguridad y cuidar a nuestros seres queridos de futuras infecciones. Además, las vacunas y tratamientos siguen actualizándose por lo que es importante mantenerse al día con los nuevos descubrimientos e indicaciones.

Funcionarios del Gobierno del Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, aseguraron que desde noviembre de 2022 que la posibilidad de un aumento en el invierno boreal de los casos de COVID y la necesidad de más tiempo para la transición a un mercado privado para la venta de pruebas, vacunas y tratamientos fueron dos factores que contribuyeron a tomar la decisión hasta el mes de mayo. Esto significa que los seguros privados y los planes de salud del gobierno asumirán los costos de atención médica por el COVID para la mayoría de los estadounidenses. Situación que pone en riesgo a muchos estadounidenses con seguros médicos limitados o inexistentes.

Por su parte, la OMS recomienda a los países que continúen con ciertas recomendaciones emitidas:

● Conservar los protocolos en términos de capacidad de respuesta nacional y prepararse para eventos futuros, a fin de evitar un ciclo de pánico y descuido. 

● Integrar la vacunación contra la COVID-19 en los programas de vacunación a lo largo del curso de vida.

● Mantener las medidas para aumentar la cobertura de la vacunación contra la COVID-19 para todas los grupos de alta prioridad.

La OMS también sugiere: “seguir trabajando con las comunidades para lograr programas sólidos, resilientes e inclusivos en materia de comunicación de riesgos y participación de la comunidad”. Y finalmente, la Organización recomienda seguir eliminando, poco a poco, las medidas de salud relacionadas con las COVID-19 aplicables a los viajes internacionales, en función de las evaluaciones de riesgos; seguir apoyando la investigación para mejorar las vacunas y comprender mejor las afecciones posteriores a la COVID-19. 

Aunado a estas prácticas, la OMS publicó un plan estratégico para facilitar la transición de los países a una nueva realidad sin la COVID-19 como ESPII, es el Plan Estratégico de la OMS de Preparación y Respuesta frente a la COVID-19 para 2023-2025.

Referencias:

https://www.paho.org/es/noticias/8-5-2023-covid-19-es-ahora-problema-salud-establecido-persistente#:~:text=A%20nivel%20mundial%2C%20se%20notificaron,2%20de%20abril%20del%202023).

https://www.infobae.com/estados-unidos/2023/03/30/el-senado-de-eeuu-aprobo-un-proyecto-de-ley-para-dejar-de-considerar-el-covid-19-como-una-emergencia-nacional/

https://cnnespanol.cnn.com/2023/05/05/oms-covid-19-ya-no-es-una-emergencia-sanitaria-mundial-trax/

https://www.aarp.org/espanol/salud/enfermedades-y-tratamientos/info-2020/coronavirus-sintomas-evitar-el-contagio.html