Desde 1970, cada 28 de junio se celebra el día del orgullo LGBTQI+, a través del cual se busca reivindicar el sentimiento de orgullo sobre las identidades, las diversas orientaciones sexuales y de género que han sido históricamente marginadas. A nivel mundial se realizan convocatorias de toda la comunidad del colectivo LGBTQI+ que exigen el respeto a sus derechos y la igualdad entre todas las personas. También existen convocatorias políticas para exigir al Estado la protección de la integridad de los miembros de la comunidad que han sido victimas de discriminación y crímenes de odio. 

Es importante mencionar que esta celebración tiene historia, y una historia de lucha por exigir el respeto e igualdad que se ha visto negado gracias a imposiciones sociales y políticas por una sociedad heteronormativa que criminaliza las diferencias. Así, la celebración del orgullo LGBTQI+ nació del enfrentamiento que tuvo lugar en el bar Stonewall Inn de Nueva York en el año 1969, entre agentes de la policía y la clientela del bar.

El Stonewall Inn era un bar gay de Nueva York donde miembros de la comunidad se reunían a finales de los años 60. Nació como un espacio seguro para que las personas diversas pudieran interactuar y convivir desde la libertad, el respeto y seguridad que la sociedad les negaba. 

Tras esos enfrentamientos, en 1970 diversos grupos de la misma comunidad LGBTQI+ en Estados Unidos formaron el “Gay Liberation Front” (Frente de liberación Gay, en español) y se declararía el 28 de junio Día del Orgullo, en recuerdo al enfrentamiento de Stonewall, y así nace la primera manifestación del Orgullo con sede en Nueva York en 1970. Dicha iniciativa marcó un hito histórico en la lucha de los derechos de la comunidad LGBTQI+ e influenció los movimientos en todo el mundo.

Además, fue el inicio de una lucha que poco a poco ha tenido sus batallas ganadas. En 1924 en Estados Unidos, la Sociedad para los Derechos Humanos, fundada por el activista Henry Gerber, con sede en Chicago, se convirtió en la primera organización de derechos de personas homosexuales en los Estados Unidos. Fue seguida por la Sociedad Mattachine, la organización nacional de derechos de personas gays, en 1950, y por las Hijas de Bilitis, una organización pro derechos de las lesbianas, en 1955.

En 1962, Illinois se convirtió en el primer estado de Estados Unidos en despenalizar las conductas sexuales con consentimiento mutuo entre adultos del mismo sexo y en privado. Once años después, en 1973, la Asociación Estadounidense de Psiquiatría retiró la homosexualidad de su lista oficial de trastornos mentales. Y el 14 de octubre de 1979, la Marcha Nacional en Washington por los Derechos de las Lesbianas y los Homosexuales reunió a unos 75.000 hombres gay, lesbianas, bisexuales, transexuales y sus aliados heterosexuales y estableció los derechos LGBTQI+ como un asunto nacional.

En la actualidad, el matrimonio entre personas del mismo sexo es legal en todo el país gracias a un histórico fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos emitido el 26 de junio de 2015. En esa fecha, el Tribunal Supremo dictaminó que los 50 estados de Estados Unidos deben otorgar licencias matrimoniales entre personas del mismo sexo y reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo celebrado en otros estados.

Al ver hacia atrás podemos reflexionar en el alcance que esta celebración ha tenido, tanto en la sociedad en general con el fin de visibilizar a una población que ha sido víctima de estigmatización y violencia injustificada y así también, en las generaciones jóvenes queer que nacieron con la celebración del orgullo como algo cotidiano y habitual. 

Desde el 2012, la consultora Gallup realiza una encuesta para identificar, entre mayores de 18 años, a los individuos que se reconocen con una orientación sexual diferente a la cisgenero. En el 2022, un 7,1% de la población en los Estados Unidos se reconoce como miembro del colectivo LGBTQI+, siendo los más jóvenes quienes levantaron la estadística para llegar a este número histórico. Este 7,1% del 2022 es el doble de la cifra de personas que se identificaban con el colectivo en el año 2012.

Estos números reflejan una realidad presente en la que cada vez es menor el miedo, y el orgullo de vivir con honestidad tu identidad aumenta. Un orgullo de vivir en una sociedad que comprende totalmente la importancia de la plena integración, no solo de la orientación sexual y la identidad de género, sino también de las razas y la religión. Una sociedad que permita una vida plena y segura para cada uno de sus individuos en el pleno ejercicio de su libertad y sus derechos fundamentales como personas.

NHCOA celebra los logros alcanzados y al mismo tiempo reconoce que todavía hay mucho trabajo por hacer y muchas batallas que ganar. Al mismo tiempo reconoce que es responsabilidad del Estado y la sociedad civil fundamentalmente, construir un espacio seguro para los miembros de la comunidad LGBTQI+ en el que puedan desarrollarse con plena confianza y libres de todo tipo de discriminación y estigmatización en su vida diaria. 

Así, seguir la lucha para eliminar el rechazo de las familias de personas LGBTQI+, porque aún hay países donde sigue siendo un crimen ser diverso y amar en libertad. Luchar por las vidas de las personas trans que han sido víctimas de la transfobia. Luchar por exigir a las autoridades que garanticen los derechos fundamentales de los miembros del colectivo LGBTQI+ más allá del discurso, reivindicando los Derechos Humanos inherentes en todo individuo.

¡Feliz día del Orgullo!

Referencias:

OPINIÓN | Marchemos por el orgullo y para reclamar nuestros derechos (cnn.com)

El 7% de la población estadounidense se identifica como LGBTQ+ – Infobae

Avances de los derechos LGBTQI+ en EE. UU. | ShareAmerica

¿Por qué se celebra el 28 de junio el Día del Orgullo LGTBQI+? (elespanol.com)