La disfagia es la dificultad o la imposibilidad de tragar alimentos sólidos o líquidos, debido a cambios en el sistema digestivo, como la disminución de la producción de ácido gástrico y la disminución de la movilidad intestinal. Puede afectar a cualquier persona y se agrava en personas mayores de 70 años y aquellas que padecen Alzheimer, Parkinson o demencia senil.
Cabe mencionar que la disfagia en adultos mayores no solo afecta al momento de tragar sino también puede ocurrir a la hora de introducir el alimento en la boca, al masticar o en el desplazamiento del bocado de la garganta al estómago.
La sensación más habitual es la de sentir que el alimento se queda atascado o no desciende completamente. Si bien es cierto, la dificultad ocasional para tragar no suele ser motivo de preocupación, la disfagia persistente puede derivar en problemas más graves de salud.
Si no se trata a tiempo, esta condición puede producir complicaciones más graves como la desnutrición o deshidratación derivada de la dificultad para ingerir alimentos líquidos o sólidos. Otras consecuencias son el atragantamiento, si el alimento bloquea las vías respiratorias; o neumonía por aspiración, si el alimento pasa a las vías respiratorias y no al esófago, pudiendo introducir en los pulmones algún tipo de bacteria.
Entre los síntomas más habituales se pueden detectar: babeo, retención de la comida en la boca, tos después de tragar, borboteo y sensación de nudo en la garganta.
Existen diferentes tratamientos para la disfagia, los más comunes y recomendables son aquellos enfocados en disminuir los síntomas. Por esa razón, generalmente, un tratamiento para la disfagia en adultos mayores tendrá como objetivo lograr que el paciente se alimente e hidrate de manera eficaz y sin riesgo. Es decir, obtenga los líquidos y nutrientes suficientes para mantenerse saludable. Además, prevenir la aspiración de alimentos y líquidos hacia el sistema respiratorio.
Ante esta condición se recomienda cambiar a una dieta blanda o de fácil masticación. De esta forma, se modifican las textura de los alimentos duros y difíciles de tragar, permitiendo la digestión y absorción de nutrientes.
Recomendaciones para alimentar a un adulto mayor con disfagia
- Verificar que el adulto mayor se encuentre despierto y con disposición de comer.
- Es importante estar en un lugar sin distracciones para el adulto mayor, como la televisión, la radio o más personas alrededor. Esto beneficiará la tranquilidad y comodidad para poder consumir los alimentos.
- La postura es sumamente importante para prevenir complicaciones a la hora de comer. Tener una buena postura permitirá la entrada de los alimentos de forma correcta y minimiza el riesgo de atragantamiento.
- Aprovechar los momentos cuando el adulto mayor se encuentre más descansado y se sienta con más fuerzas para enfrentar el proceso de comer.
- Tener en cuenta que las cantidades de comida son importantes. En estos casos la cuchara pequeña será la mejor opción para consumir los alimentos por el adulto mayor.
- Se recomienda comer comidas más pequeñas y con mayor frecuencia, en lugar de tres comidas grandes al día.
- Después de cada comida, se recomienda que el adulto mayor continúe con la postura incorporada durante un tiempo de entre 30 minutos y una hora para evitar el reflujo. Cepillarse los dientes después de comer también reduce el riesgo de atragantamiento por restos de comida que pudieran quedar.
- Beber suficiente agua puede ayudar a mantener la digestión y prevenir la deshidratación. Tomar en cuenta que al administrar líquidos a una persona con disfagia lo mejor será usar espesantes o gelatina para evitar accidentes.
- Tomar enzimas digestivas antes de las comidas puede ayudar a digerir mejor los alimentos. En estos casos es importante tener el acompañamiento del médico para indicar lo mejor para el paciente.
- Consultar con un médico o dietista si la dificultad para digerir los alimentos persiste o empeora. Se recomienda consultar con un médico o un dietista para obtener posibles tratamientos.
Referencias:
Qué es disfagia en personas mayores – Teleasistencia
Nutricion y Cuidados del Adulto Mayor. Estudio Monografico\205 (fiapam.org)
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